21 marzo 2008

Semana Santa III


Un Viernes Santo cuajado de cariño, de paseo nostálgico por nuestros barrios de origen. Teresa algo emocionada recordaba calles, situaciones y murmuraba “cómo cambia la ciudad” yo interpretaba que decía “como cambia la vida” y la recordaba a ella muy joven llevándome a la escuela por estas calles que hoy paseábamos, y que ahora ella ya anciana y yo muy madura repasábamos en aquel espacio renovado, porqué es cierto que todo cambia y las ciudades y las personas también, como en un suspiro nos habíamos puesto tan mayores y parecía que ahora yo la llevaba a ella.
Comida sana al mediodía con un punto de espiritualidad compartida y el reencuentro con Mon ausente todo el día.
Llega la noche y la recibo con alegría.

No hay comentarios: