28 mayo 2007

De las alegrías que me dan mis amigas o gracias Inserso

Contenta me hallo como he venido explicando en los anteriores post. No por cosas transcendentes que, no sé que me pasa, pero no suelen venirme a la mente, aunque mis post estén algunas veces pintados con una pátina criptica, es por ponerme misteriosa. Pues si, decía que no me vienen a la mente. Más bien me viene el menú de la cena, los bañadores que con tanto trasiego acuoso no se terminan de secar, la marca del ambientador que echan en este recinto que tanto me gusta.


Así de intrascendente ando de un lugar a otro, de una piscina a la otra sin reconocerme. Pero, mi alegría de hoy viene a cuento porqué a las 5 de la tarde y para mejorar la circulación (de la cual yo no he expuesto queja alguna ) me dan a mi y a mis nuevas amigas una ducha circular (a cada una de nosotras una y no una a todas que sería más populista) y claro al lado de setentonas que nos desnudamos para tomar las beneficiosa agua que en mil chorritos se dispara hacia el cuerpo, personalmente parezco a su lado, la “Mis Aragón” como mínimo y ellas así me lo reconocen.


Me hacen sentir muy estupenda. Claro que ellas en el comedor no se cortan un pelo y mientras yo me zampo con el frenesí que me caracteriza “un solomillico” a la plancha acompañado por “verduricas” al vapor, ellas se colocan entre pecho y espalda unos enormes entrecots con salsa y patatas fritas que les sienta de fábula, lo veo en sus caras de placer y lo sé porqué más tarde en la ducha circular nadie dice sufrir de indigestión y ríen felices tan bien comidas, ante los chorritos sanadores.
La vejez de hoy es otra cosa gracias al INSERSO. A mi la “duchica” me sale por un ojo de la cara igual que el “solomillico” que me como, mientras que a ellas les sale gratis o casi , y eso gracias al bendito sistema público. Y que dure por lo menos hasta que me jubile que correré como una posesa para pedirme un balneario. Creo que ellas saben que voy de pardilla o de pagana vamos y por eso admiten que a mi me llamen primero sin protestar y me animan mientras se ríen satisfechas y felices. Yo también me rio como olvidándome de las flacas, como si no existiesen en este nuevo mundo de matronas felices que cuidan sus barrigas con buenos alimentos y chorritos de agua para la circulación a la hora del té . Un disfrute para esta sílfide que os escribe.
Eh chicas que estoy encantada de tomar “duchicas” con vosotras!!!!, ¿Vendréis mañana al lago?

1 comentario:

montse dijo...

Ja he llegit els teus post i veig que vas d'experiència amb experiència i totes bones....Me n'alegro molt.
Aprofita-ho bé i no et perdis cap sensació!!...
Una abraçada.