Dos palabras

MAGIA es mi palabra preferida, cualquiera cosa, persona, situación que se relacione con esta palabra es una cosa buena para mí. La mejor carta del Tarot es el mago, me encantan sus posibilidades infinitas. Me gusta pensar en las mil posibilidades que cada día se me presentan y aunque sé que mi mente no sabe o puede reconocerlas todas, algunas voy descubriendo y me reconcilia con el paradigma de mi mundo que se creó en mi infancia y que he ido recreando año tras año y ya son unos cuantos.
Mi mundo es mágico, es el mundo de mi infancia, donde los rayos de sol que se filtraban por las persianas desvelaban las partículas de polvo en una danza lenta. De mi adolescencia cuando las palabras se configuraban en versos y me transportaban a un lugar que entonces no sabia lo que era y ahora si lo sé. De mi adultez cuando las personas llegaban a mi justo cuando yo las necesitaba. Espero que también en mi vejez siga mejorando mi mundo. Quiero pensar que la casualidad no es fortuita sino que el mundo se ordena para que vaya descubriendo el significado de su enigma, mi segunda palabra preferida.

El enigma lo impregna todo, es la misma esencia vital y creo que determina el juego en el que participamos por el solo hecho de respirar.
Hay algo o mucho de enigma y algo o mucho de magia en mi vida.