11 octubre 2005

Entre cosas que me gustan II

Las Vainica Doble

Aunque ya estoy en época de deconstruir el ego, sé que no puedo realizar bien esta difícil, aunque necesaria labor si no doy un paseo por algunas de las cosas que me han aportado placer, de ahí que me apetezca repasar y enumerar aquello que a lo largo de mi vida me ha ayudado a pasar buenos momentos, bien por el placer en sí, bien porqué me ha abierto puertas a otros universos. Salvador Pániker dice en uno de sus libros de memorias, creo que en el Cuaderno Amarillo o en Variaciones 95, que para la deconstrucción del ego es necesario haber construido uno yo fuerte (por ahí voy bien servida).

Me siento plenamente identificada con la frase “nuestra patria es nuestra infancia” Creo que de ahí parte la construcción de nuestra personalidad, de la mía desde luego y entre todo lo que he ido y voy reconociendo de lo que descubrí y mejoró mi vida, el dúo Vainica Doble, tiene un valor precioso.

Andaban los primeros años de la década de los sesenta y por el único canal de televisión que emitía, un joven Armiñan realizaba una serie y como sintonía las voces de las Vainicas con sus composiciones. Unas letras frescas, irónicas, llenas de moralejas underground, de colores naif. Me encantaba la serie, pero sobretodo, sobretodo, las voces que venían de otro mundo que imaginaba más libre, lleno de otras posibilidades distintas a las que me ofrecía una escuela férrea de monjas un tanto esperpénticas y una casa oscura y bastante incómoda.

Ahora, si tuviese solucionado el tema técnico de añadir un clip de sonido al blog, tema que me solucionará Miquel en un “plis”, en este post os pondría, por ejemplo, que sé yo algo del Eslabón perdido, seguro que Alas de algodón o Escrito con sal y brea o El Pabú del mítico álbum Heliotropo.

Mi amiga Alfonsi me dejó poco antes de morir dos discos de las Vainicas: El Tigre del Guadarrama, (1981) y Taquicardia (1984). Por favor no os perdáis sus canciones.

Una de ellas Carmen Santonja ya no está con nosotros, murió hace unos años dejando sola la voz de Gloria. Ya no habrá más canciones y sus voces, sus composiciones sólo ya en los discos y CD’s. Apenas actuaron en directo, Gloria tenía fobia al público y cuando empezaban un concierto a la cuarta o quinta canción Gloria decía y ahora para acabar... No persiguieron el triunfo, pero sí fueron fieles a una manera de ver el mundo que se reflejaba en todos sus composiciones. Hoy son un grupo de culto y a mi me gustan.


1 comentario:

Anónimo dijo...

A mi també has fet que m'agradin. No ha estat possible amb la Feliu