18 noviembre 2005

Entre prisas

Una interesante conversación entre Joan, dueño de la ferretería que me proporciona clavos y demás artilugios para mejorar mi hábitat, Albert dueño de la floristería que me proporciona plantes i flores para también, mejorar mi hábitat y yo misma que pasaba por allí como siempre con la cabeza en las nubes. Curiosamente aún sin cabeza me reconocieron y me invitaron a dar mi opinión sobre el Estatut, Maragall, los impuestos, siempre demasiado elevados para los comerciantes y sobre la actitud del PP. Servidora por mi parte andaba pensando en la complejidad de los roles que cada cual desarrollamos en el espacio de tiempo de que disponemos. En el complejo equilibrio de las relaciones. En el crédito emocional que estamos dispuestos a ofrecer en cada relación. En la percepción de las cosas. Tambien en lo abandonado que tengo el blog, lo poco que atiendo a mis amigas y lo mucho que las necesito y que queréis Maragall, los impuestos, el Estatut y por supuesto el PP me distorsionaban la cadencia en la que mi pensamiento se columpiaba. Así es y así os lo cuento. Pero siempre se puede hacer un esfuerzo y a pesar de todo a mi Maragall me gusta y más “maragalladas” hace o dice, más me gusta. Que pena los políticos tan políticamente correctos! Que pena no saber subir a la maroma y saludar a la caída! Que pena tanta vulgaridad! Si queridos Albert i Joan, me gusta ver a Maragall poniéndole una corona de espinas a Carod, me gusta que diga lo que piensa sin pensar en las opiniones de todos. Me gusta que se cuestione la efectividad de un gobierno, el suyo, poco efectivo exactamente en las Conselleries que el ha señalado. Y me da pena que el Tripartito haya frenado un impulso regenerador.
No, amigos no creo que los impuestos sean tan caros y sí creo que nos los devuelven con servicios. Posiblemente el Estatut haya que defenderlo hasta un punto, aquel que no nos separe de nadie pero que nos permita crecer y del PP y su política, esta sí, separatista, creo nos excita la memoria del pasado, las diferencias insalvables, la mentira por encima de los argumentos, prefiero no opinar porqué se me calienta el ánimo y ya he tenido un día agitado. Y ahora parto rauda y veloz hacia mi casa donde mi perra me espera para su paseo, adiós amigos.



No hay comentarios: