Entre cosas que me gustan I

Es domingo, un domingo oscuro y lluvioso, ideal par desayunar en la terraza, abrigada y dispuesta a oír la singular sinfonía del agua cayendo sobre las hojas de las plantas. Y aquí estoy, con un té caliente, los periódicos dominicales y esa sensación de profundo recogimiento que siento cuando las nubes bajan para envolver el trocito de cielo que puedo contemplar des de mi terraza.
Todo parece ordenarse en una perfección contemplativa. Se hace un silencio que sólo rompe el sonido de la lluvia. Intento que en mi mente no se produzcan palabras que me entretengan de este momento único y respiro para sentirme presente, unida a esa vida que sin ruido, con ese sigilo que visten los momentos profundos cuando la conciencia parece expandirse buscando otra identificación más allá de uno mismo, quiere superar ciertos temores de propio ego.
Al rato vuelve la normalidad, el entretenimiento y ojeo la prensa. Es el único día que me puedo permitir dedicar unas horas a leer opiniones, artículos, entrevistas que me interesan. Hoy en el Domical de El País una entrevista con el editor y conde de Siruela: Jacobo Fizt-James Stuart que tras vender su espectacular editorial Siruela tiene un nuevo proyecto, una nueva editorial: Atalante que dirigirá desde su también espectacular masía del Ampurdán. No sé muy bien por qué siempre me interesan los hombres y las mujeres que dedican su tiempo a editar libros.
El antiguo dueño de la Editorial Siruela, vive en el campo y dice que se siente muy libre como artesano. Me gusta la idea de retirarse a vivir a un espacio tranquilo, más natural y conservar la actividad profesional. Hoy gracias a Internet la conexión con el mundo es posible estés dónde estés. Me gusta fantasear con la idea de retirarme a un lugar abierto, rodeada de árboles, cerca del mar desde dónde trabajar sin presiones. Terminaré haciéndolo, porque para bien o para mal siempre se cumplen mis deseos.

En la imagen Lluvia de Celina Ferreyra