De oníricas aventuras

Los esfuerzos de la jornada se diluyen entre las sábanas; a veces toman formas fantasmagóricas que inquietan, otras veces el sueño las diluye y no quedan restos de recuerdos. En el sueño hay cierta magia que nos pasea entre caminos llenos de interrogantes. Los dolientes reviven escenas que consuelan o no y el infierno en el sueño se hace insoportable.
De los espacios oníricos se sabe poco.
Creo que en la noche y mediante el sueño, vivimos de nuevo, otras vidas, otros momentos, algunas revelaciones nos son regaladas en ese espacio. En este blog he explicado alguna que otra experiencia que ha sido importante.
Entrar en el espacio de los sueños es como vivir una muerte pequeña y lo que sucede a partir de ahí es impredecible.

De cantares y canciones

Hoy tengo una conversación “de profundis” con alguien con quien comparto buenos propósitos, paseos y alguna que otra promesa para decirle que he hecho una opción por la excelencia. Una opción por la excelencia, que es eso!!!!!
Se lo explico con pelos y señales todo mi anhelo por mejorar mi coherencia interna, externa, circundante. Dos horas de conversación donde me vuelco en explicaciones.
Me mira con un poco de escepticismo tiznado de cariño y carraspea para empezar a entonar:
“Por ser una chica excelente, por ser una chica excelente…..”
En fin que compañías!!!!!!

De encuentros y sonrisas

Ayer un pequeño puente apareció ante mí. Apenas había comenzado la relajación final de mi sesión de yoga mi mente vacía, ningún pensamiento con que entretenerme. El cuerpo tranquilo después del esfuerzo que me estira el músculo y me encoje la dispersión; empezó a sonar una música relajante y en la oscuridad del vacío fértil que dice Paco Peñarrubia, zas!!!! Me doy cuenta que morir es sencillo y se abre la luz de la conciencia a más conciencia. Entonces mi profesor de yoga me sonríe y yo vuelvo a la luz de las formas más sabia.
Así es el yoga!